Actuación: Miqui Puig
Dia: Sábado 13 de Febrero de 2010
Hora: 19,00
Lugar: Auditori del Centre Cultural de Sa Nostra de Palma de Mallorca
Precio: Gratis
Cuando entramos vi a Miqui en un rincón ordenando su pequeña parada de discos y objetos. Ahí estaba, sin ningún problema por ser visto antes de empezar. Me pareció algo más delgado que la última vez que lo vi. O es que la tele engorda. Iba vestido con una chaqueta de punto Fred Perry azul y unos tejanos, muy en consonancia con la música que hace desde que se acabaron "Los Sencillos" hace ya diez años.
Al presentar una de sus últimas canciones, en mitad de la frase "Ara cantarem una cançó molt bonica" alguien del publico se sonó la nariz a un volumen importante: "¡Moooooooooooc!" Miqui lo señaló con la misma mano con la que sujetaba su copa de vino y dijo: "Es nota que té molt d'interés", o algo parecido.
Es un tipo simpático, Miqui Puig, todo el rato te hace sonreir, te cae bien.
Antes de comenzar el concierto el escenario estaba preparado con tres taburetes y tres micros. Miqui salió con una botella de vino y una copa en la mano seguido de sus dos guitarristas. Él y dos guitarras eléctricas eso era todo el combo. Cantó canciones de sus discos anteriores que presentaba a partir de discursos en los que contaba, a trozos, una ficción: no sé qué sobre que se había presentado a un concurso de cantautores del que lo habían despedido antes de admitirlo. Y explicaba anécdotas sobre cómo ve el panorama en general.
Lo que hace Miqui en directo con sus dos amigos suena a un lounge-pop agradable, inteligente, sobrio y, a la vez, algo loco. Dos guitarristas veteranos, curtidos que envuelven las canciones urbanas, un poco ácidas, un poco dulces, de un tipo no muy guapo que las canta con la ilusión de un chaval y eso que ya anda por los 42. Y los tres allí actuando, bebiendo vino tinto (sobre todo Miqui) y hablando entre ellos como si estuvieran en el salón de su casa.
Hubo canciones de sus discos antiguos (sus discos en solitario y una de "Los Sencillos") y canciones de su próximo disco. Disco que se titulará "Homenaje a Barcelona" en el que todo serán versiones de temas que le han maravillado. Hubo desde clásicos absolutos como "Qualsevol nit pot sortir el sol" de Sisa hasta joyas ocultas del pop catalán de hoy como "Miquel a l'accés 14" de Mishima, un emocionante grupo barcelonés.
Miqui Puig parece contento con lo que está haciendo ahora o, por lo menos, moderadamente contento, sí. Cuenta historias de gente que se reune a cenar, que ha pasado los treinta, incluso los cuarenta, que viste más o menos casual pero con clase y a la que no siempre le cuaja el amor.
El tema de "Los Sencillos" que cantó se titula "Sandie Shaw". Me tiene atrapado. Sandie Shaw, por Dios, la ultramítica cantante de los pies descalzos de finales de los 60. Aquel peinado de media melena lisa con las puntas hacia dentro que hace poco ha vuelto a estar de moda. Su tema "Marionetas en la cuerda", sus piernas, en fin.
Sus canciones actuales tienen más calidad que las de la época de "Los Sencillos", en los 90. "Los Sencillos" combinaban temas pop con cuerpo ("Sandie Shaw y otras) con cafradas. Se lo pasaban bien, sí, era el pop del optimismo y la buena vida un poco tonta. Temas como "Bonito es", alguna versión como "Se fuerza la máquina" de Gato Pérez y un disco como "Bultacos y Montesas" quese hubieran podido ahorrar.
Últimamente Miqui ha participado como jurado en concursos televisivos como "Factor X" del canal Quatro. Hace muecas y, bueno, interpreta su papel. Y es que como se dice por ahí "la vida está mu mala" y la pasta siempre suena bien, creo yo. Aunque el afirma que lo hace porque le gusta.
Cuando nos fuimos, la gente se agolpaba sobre el tenderete que había montado Miqui. Vendía Cds, bufandas futboleras con su nombre y vinilos blancos preciosos.